Angel otero carpintería
Economía circular
- Angel Otero carpintería
Economía circular
Desde la Carpintería Ángel Otero queremos aportar nuestro “granito de arena” por un planeta mejor, de modo que estamos comprometidos con la economía circular de la madera, la cual se alinea con nuestros valores.
La economía circular es un modelo de producción y consumo que implica compartir, alquilar, reutilizar, reparar, renovar y reciclar materiales y productos existentes todas las veces que sea posible para crear un valor añadido, provocando de esta forma, extender el ciclo de vida de los productos y reducir los residuos al mínimo.
Es decir, cuando un producto llega al final de su vida, sus materiales se mantienen dentro de la economía siempre que sea posible, los cuales, de esta manera, pueden ser productivamente utilizados una y otra vez, creando así un valor adicional. En nuestro caso, utilizaremos aquellos productos de composición maderera.
En la economía circular, la madera es la materia prima por excelencia ya que cumple con todos los requisitos para generar ese crecimiento sostenible, porque requiere de un menor consumo energético para la fabricación de sus productos.
Es reutilizable, puesto que la madera y sus productos tiene un ciclo de vida infinito ya que se puede reutilizar de manera reiterada. Asimismo, es eficiente, porque es un gran aislante térmico y acústico que además regula la humedad. Del mismo modo es saludable, ya que contribuye a la creación de entornos óptimos, y, finalmente, es confiable, porque la madera mantiene sus prestaciones durante un largo periodo de tiempo.
Junto a lo anterior, el aprovechamiento de la madera de manera sostenible contribuye a la preservación de los bosques y a fijar población en el medio rural. La certificación forestal y de cadena de custodia, por su parte, son instrumentos que la industria de la madera emplea para garantizar una producción sostenible, tanto en el bosque, como a lo largo de toda la cadena de valor de la madera.
Lo ya citado, contrasta claramente con el modelo económico lineal tradicional, basado principalmente en el concepto “usar y tirar”, que requiere de grandes cantidades de materiales y energía baratos y de fácil acceso.
Dicho modelo, está abiertamente ligado a la obsolescencia programada, la cual consiste básicamente en aquella programación del fin de la vida útil de un producto, que, tras un período de tiempo calculado de antemano por el fabricante, se vuelve no funcional, inútil o inservible por diversos procedimientos. Esto, está claro que no es bueno para la sostenibilidad del planeta al largo plazo, por ello, la estrategia Europa 2020 promueve un crecimiento sostenible, inteligente e integrador que actualmente, es la principal estrategia para generar crecimiento y empleo. Una de las siete iniciativas de la estrategia Europa 2020 es “una Europa que utilice eficientemente los recursos”.
Con esta estrategia, la Comisión Europea fomenta la transición de Europa hacia una economía circular, es decir, hacia un sistema de máximo aprovechamiento de los recursos donde se reduzcan al mínimo los residuos. El objetivo es pasar del modelo tradicional “fabricar, usar y tirar”, propio de una economía lineal, a uno nuevo basado en “reducir, reutilizar y reciclar”.
En nuestro caso concreto, comenzamos el ciclo integral de tratamiento de la madera, obteniéndola a través de diversos almacenes de madera situados en diversas partes de Galicia, es decir, tiene origen local.
Una vez seleccionada meticulosamente, se envía directamente a nuestro taller, en donde se transforma a través de diversas máquinas, herramientas y se le aplica un tratamiento especial con diversos productos, los cuales en muchos casos tienen origen natural (así como algunos tipos de barnices, colas…). Así, podemos conseguir de manera artesanal, unos resultados excepcionales, adecuados y personalizados a cada tipo de cliente.
A través de este proceso manufacturero, esa madera vuelve a su origen a través del serrín, el cual es donado a particulares, que lo emplean en cuadras para hacer compost, que posteriormente acabará en las tierras como abono, de donde previamente ha sido obtenida la madera.
Por otro lado, aquella madera sobrante (listones sobrantes, vigas, puntones, o diversos trozos, se emplean para realizar objetos funcionales como utensilios de cocina, soportes para móviles, ordenadores… Aunque en aquel caso de que dicha madera no se adapte por sus circunstancias, será transformada en leña.
Finalmente, se cierra así un círculo desde el cual buscamos aportar valor a la sociedad, cuidando la madera desde su obtención a través de proveedores locales, hasta el final de la vida útil de esta como abono o combustible.